Lula y Biden tuvieron su primera reunión bilateral desde la asunción del brasileño hace dos meses. Las fuentes de la comitiva brasileña la calificaron como «excelente» y destacaron que el protocolo de las reuniones suelen ser de una hora y esta bilateral duró más de dos horas y media. «Se viene una alianza muy fuerte entre Brasil y Estados Unidos, en todos los campos», anticiparon a LPO.
Esta «nueva fase» de la relación bilateral de la que presume Itamaraty tuvo tres ejes muy marcados: Cambio climático, Amazonas y defensa de la democracia. Este último punto tuvo, como anticipó en exclusiva LPO, a Jair Bolsonaro y Donald Trump como destinatarios.
Si bien no se trató de una mención explicita a los ex jefes de Estado, Biden y Lula le dedicaron una parte importante de la reunión a las similitudes entre el asalto al Capitolio que fogoneó Trump y la toma de Brasilia que enfrentó Lula a semanas de asumir. De hecho, las similitudes fueron explícitas, como celebró el ideólogo de la nueva ultraderecha trumpista, Steve Bannon.
Exclusivo: Lula y Biden preparan una declaración contra Bolsonaro y Trump
El resumen de la conferencia que hizo la Casa Blanca es contundente. Los presidentes no respondieron ninguna pregunta, pero Biden comenzó su declaración con un mensaje muy claro: «Las dos democracias fuertes de nuestra nación han sido probadas… En ambos casos, las democracias prevalecieron».
«Cuando hablamos en enero, afirmé mi compromiso con nuestra relación. Y cuando hablamos de nuestra agenda mutua, suenan muy similares», continuó Biden.
Lula habló del aislamiento internacional que vivió Brasil con Bolsonaro y agradeció a Biden por reconocer su elección y defender la democracia. También lo felicitó por su discurso del Estado de la Unión: «Sería muy bueno que el discurso se hiciera en Brasil», bromeó.
«El presidente Biden sonrió ante ese comentario. Sin mencionar a Bolsonaro, Lula dijo que Brasil se había marginado a sí mismo durante los últimos cuatro años», agregó el texto de la Casa Blanca, que no se privó de mencionar al ex presidente brasileño.
«El último presidente no disfrutaba de mantener relaciones internacionales con ningún país. Su mundo empezaba y acababa con fake news por la mañana, por la tarde y por la noche», agregó Lula. Rápido, Biden respondió: «Suena familiar» y se rió.
En el comunicado conjunto, destacaron que «como líderes de las dos mayores democracias de las Américas, Lula y Biden se comprometieron a trabajar juntos para fortalecer las instituciones democráticas y saludaron la segunda Cumbre por la Democracia a realizarse en marzo de 2023. Ambos líderes seguirán rechazando el extremismo y la violencia política, condenan el discurso de odio y reafirman su intención de construir resiliencia de la sociedad a la desinformación y acordaron trabajar juntos en esos asuntos».
Las constantes referencias a los dos ex presidentes sin nombrarlos directamente habla del lugar que tendrá «la defensa de la democracia contra la extrema derecha» y la pelea contra las «fake news» en la agenda de Estados Unidos y Brasil. Asismismo, en el entorno de Lula plantean que el respaldo de Washington ante cualquier intento destituyente está «más que garantizado».
En el resto de los puntos de agenda, Lula aclaró que no habría fondo de inversión del G7 para el Amazonas y que por mas que acepte apoyo internacional no considera que ese territorio sea un «patrimonio de la humanidad» sino que se trata de un espacio soberano de Brasil y, en el caso de la guerra en Ucrania, el líder brasileño se ofreció como negociador con Rusia y Ucrania para terminar la guerra.