Este resultado refuerza la tendencia observada desde marzo, cuando las contracciones de empleo empezaron a desacelerarse progresivamente. Las caídas habían sido de -0,5% en marzo, -0,4% en abril, -0,3% en mayo y -0,2% en junio, lo que sugiere que, aunque las cifras siguen lejos de ser alentadoras, el mercado laboral podría estar tocando fondo.
Algunos sectores de la economía, que habían registrado importantes contracciones en los últimos meses, comenzaron a mostrar signos de recuperación. El sector de la Construcción, que había sufrido una caída constante del empleo durante  meses, presentó un incremento del 0,4% en julio. Del mismo modo, la Industria manufacturera, después de ocho meses de caídas, logró estabilizarse, mientras que el Comercio, restaurantes y hoteles registraron un aumento del 0,3% en su dotación de personal. A pesar de estos signos positivos, no todos los sectores mostraron la misma tendencia. Transporte y Servicios comunales continuarán presentando pérdidas de empleoEl análisis por tamaño de empresa también reflejó algunos cambios interesantes. Mientras que las empresas medianas, con entre 50 y 199 empleados, mostraron un aumento del 0,4%, las grandes empresas, con más de 200 empleados, siguieron registrando caídas, aunque más leves, con una contracción del 0,2%. Las contrataciones, medidas a través de la tasa de entrada de personal, también aumentan ligeramente, alcanzando el 1,6%, aunque este valor sigue siendo bajo en comparación con años anteriores. Las desvinculaciones, por su parte, se mantuvieron estables, con una tasa de salida del 1,5%.
Un aspecto positivo es el repunte en las expectativas de las empresas. Por segundo mes consecutivo, las expectativas netas de contratación fueron positivas, con un 0,8% de las empresas esperando aumentar su dotación de personal en los próximos tres meses. A pesar de esto, las variaciones han sido tan leves que  no se puede afirmar que haya un cambio de tendencia claro en el mercado.En resumen, julio de 2024 fue un mes de estabilización para el empleo en Argentina, con ciertos sectores como la Construcción y la Industria mostrando leves signos de recuperación. Comparado con los meses anteriores, donde las contracciones fueron más marcadas, la estabilidad del empleo registrado en julio es un indicio de que el mercado laboral podría estar alcanzando un punto de inflexión, pero aún parece muy pronto para asegurarlo.

Sin embargo, la fragilidad económica persiste y, aunque los números parecen estabilizarse, la recuperación total sigue siendo incierta y dependerá de cómo se desarrollen los próximos meses. Factores como la inflación, el acceso a financiamiento y el comportamiento de los mercados internacionales influirán en el ritmo de la reactivación. Además, la demanda laboral, aunque ha mostrado leves repuntes, aún está en niveles históricamente bajos, lo que sugiere que cualquier mejora en el empleo será gradual. El desafío sigue siendo impulsar políticas públicas que fortalezcan la demanda interna y mejoren las condiciones estructurales del mercado laboral para lograr un crecimiento más inclusivo y sostenido.