El 8 de febrero, el Senado de México aprobó un reconocimiento oficial del Genocidio Armenio. En sus artículos, el Senado “reconoce el Genocidio Armenio ocurrido entre los años 1915 y 1916, y se pronuncia a favor del respeto de los derechos humanos, sin discriminación alguna por motivos de raza, sexo, idioma o religión”.
Además, “exhorta respetuosamente a la Secretaría de Relaciones Exteriores a que, en el ámbito de sus atribuciones, continúe coadyuvando al desarrollo progresivo y respeto del derecho internacional a través de la política exterior desplegada a nivel multilateral” y a que, “en el ámbito de sus atribuciones, impulse el pronunciamiento formal por parte de los Estados Unidos Mexicanos del reconocimiento del Genocidio Armenio ocurrido entre los años 1915 y 1916”.
La Cancillería de Turquía emitió un comunicado negacionista el 9 de febrero en el que “rechazó” el reconocimiento del Genocidio Armenio por parte del Senado de México.